Por Monyerla Freintas.
Resulta ser algo común que escuchemos a las personas decir que otra es bipolar, cuando exploramos los motivos, nos damos cuenta que se considera bipolar a quien tiene cambio de humor. Hoy, en el Día Mundial del Trastorno Bipolar, deseo explicarles primero quién NO es bipolar:
No es bipolar quien se siente triste, llora, se molesta o siente irritable.
No es bipolar quien tiene cambios en su estado de ánimo.
No es bipolar quien se relaciona de forma conflictiva o inadecuada con otros.
Para las características antes expuestas, existen muchas razones por las cuales una persona presenta estas respuestas emocionales. Ahora bien, las características de una persona que SÍ bipolar son las siguientes:
Presencia de un al menos un cuadro depresivo grave.
Incluye malestar significativo.
Disminución de capacidad de disfrutar.
Estado de ánimo depresivo la mayor parte del día.
Alteración en áreas vitales como la laboral, escolar, académica.
Alteración en el sueño (puede que la persona presente insomnio o que duerma más horas de lo habitual).
Se afecta el apetito (puede disminuir o aumentar).
Además, presenta al menos un episodio maniaco, que incluye:
Exacerbación del estado de ánimo que puede incluir agresividad grave que coloca a la persona y a los demás en riesgo.
Presencia de conductas impulsivas (como gastarse todo el dinero de la comida comprando cosas innecesarias, ponerse en riesgo por no evaluar las consecuencias de sus actos).
Euforia (extrema alegría).
También se ve alterado el sueño (insomnio).
Es necesario mencionar que el diagnóstico debe realizarse por un psiquiatra y/o psicólogo clínico, requiere medicación de por vida, así como asistencia de sus sistemas de apoyo para acompañar y generar contención que favorezca la adherencia al tratamiento y la activación del mismo para realizar el acompañamiento ante cualquier recaída. Debemos tener presente que una persona bipolar:
No está loca. Su juicio de realidad solo puede estar interferido en las fases activas de su enfermedad.
No debe dejar su medicación ni auto medicarse.
Puede tener una vida plena y feliz con el adecuado acompañamiento psicoterapéutico y psiquiátrico.
Comments